Pablo Pueblo
Regresa un hombre en silencio
De su trabajo cansado
Su paso no lleva prisa
Su sombra nunca lo alcanza
Lo espera el barrio de siempre
Con el farol en la esquina
Con la basura allá en frente
Y el ruido de la cantina
Pablo Pueblo
llega hasta el zaguán oscuro
Y vuelve a ver las paredes
Con las viejas papeletas
Que prometían futuros
en lides politiqueras
Y en su cara se dibuja
la decepción de la espera.
BLADES. R. DisponíveI em: http://rubenblades.com. Acesso em: 26 jun. 2012 (fragmento)
As 2ª e 3ª estrofes evidenciam o descontentamento do personagem perante os cartazes políticos nas paredes, que prometiam um futuro que nunca chegou.